Contenidos
A finales de los 80 fue declarada extinta, renaciendo sorprendentemente en Costa Rica en 2003
El reino animal nos sorprende cada cierto tiempo con la exhibición de maravillosas especies que parecieran producto de la más sublime imaginación de su creador, presentando características propias que las convierten en verdaderas obras de arte de la naturaleza. Ese es el caso de la famosa Rana Arlequín, también conocida como Rana Payaso, un extraordinario anfibio comúnmente encontrado hasta finales de los 80 en los bosques húmedos tropicales de la costa oeste de Panamá, y la Cordillera de Tílaran en Costa Rica, la cual había desaparecido de esta región hasta el año 2003, cuando algunos zoólogos que realizaban estudios en una zona costera de Quepos, encontraron un considerable número de ejemplares de esta familia.
Nombre Científico: Atelopus varius
Clase: Amphibia
Orden: Anura
Familia: Bufonidae
Esta multicolorida especie que acostumbra a vivir en ríos y quebradas adyacentes a bosques tropicales, sufrió una considerable merma desde comienzos de la década de los 90 calculada en más del 75% de su población total, lo que llevó a declararla en grave peligro de extinción, movilizando gran cantidad de investigadores y científicos de todo el mundo para estudiar la situación y buscar posibles detonantes o causas probables, siendo considerado como primer factor, los significativos cambios climáticos que se han experimentado en la región en los últimos 30 años, la existencia de agentes químicos de alta toxicidad en el ambiente, y al descubrimiento en la región de Monteverde, Costa Rica, de un agresivo hongo patógeno llamado Batrachochytrium dendrobatidis, el cual se adhiere a los anfibios a través de esporas esparcidas en el agua y causa una mortal infección en ellos, siendo comprobada su culpabilidad en la completa aniquilación de otra especie de anfibios autóctona, el Sapo Dorado.
Una Especie Renacida
Después del redescubrimiento de la especie en Quepos, en 2005 se registró otro importantes avistamientos de un grupo de más de 300 individuos en la Reserva Natural de Talamanda, siendo sometidos a un minucioso seguimiento científico a través del “Proyecto Rainmaker” el cual arrojó una tasa de desarrollo y crecimiento verdaderamente increíble con más de 400% por año, cifras que se han mantenido por más de una década, considerando los especialistas que esta podría representar el verdadero y completo renacer de la Rana Arlequín.
Características
Es un pequeño anfibio de 5cm aproximadamente de comportamiento diurno que puede encontrarse comúnmente en piedras, troncos y grietas cerca de arroyos y ríos, y cuenta con una increíble variabilidad de colores según la subespecie, presentando un verdadero mosaico de manchas y rayas que pueden ser naranja, amarillas, rojas o azules, las cuales se conjugan perfectamente con el negro o marrón oscuro de su torso, y un vientre naturalmente blanquecino, amarillento o rojizo, contando con la capacidad de segregar a través de su piel toxinas venenosas que sirven para repeler algún depredador que ose acercarse demasiado, basando su alimentación en insectos, moscas y pequeñas arañas autóctonas de la región.